Alejandra Guzman
Am, Bb, C, Dm, Em, F, Gm
Mírala, mírala, mírala, diosa vestida de saliva y sal, los ojos muertos en blanco
quimiendo en el suelo del salón. Míralo, míralo, míralo, aunque el desnudo bañado
en sudor, subiendo las montañas de su cuerpo. No te pares, por favor.
Al calor del mediodía, combate salvaje. Mírala, mírala, mírala, cómo se aguita,
pide más. Muere y renace de entre las cenizas, volviéndolo a encelar. Entro casi de puntillas
y en plena penumbra, la hoguera encendida de mis pesadillas. Eres bello, bello, bello,
que el firmamento con un millón de estrellas. Es fácil perdonar cuando se quiere de veras.
Eres bello, bello, bello, peligroso y bello, mucho más se la cuenta.
Tendría que gritar pero me muerdo la lengua.
Mírala, mírala, mírala, se desenreda, se vuelve a enredar, una medusa bajo la marea,
a punto de naufragar.
Míralo, míralo, míralo, tan orgulloso, tan sentimental, pidiendo música rosa lo
lo mismo que a mí me hace cantar en la puerta hipnotizada de mi propia casa no puedo creerlo
por más que lo veo eres bello, bello, bello más que el firmamento con un millón de estrellas
Es fácil perdonar cuando se quiere de veras
Eres bello, bello, bello, peligroso y bello
Mucho más de la cuenta
Tendría que gritar y no me muerdo, no
Bello, bello, bello, más que una puesta de sol
Aunque el desnudo bañado en sudor
Bello, bello, bello, peligroso y bello
No, por qué me haces esto, dímelo
Bello, bello, bello, más que una puesta de sol
La veo y no puedo creerlo, no
Bello, bello, bello, demasiado bello